¡Bogad, malditos, bogad! — Microrretos El tintero de oro
CUADRO DE CONTENIDO |
La convocatoria
Condicionantes
- CONDICIÓN: Escribe un micro con un villano como protagonista.
- EXTENSIÓN: Un límite máximo de 250 palabras.
- PLAZO: Hasta el 30 de Noviembre.
- PARTICIPACIÓN: Una entrada en el blog del participante.
- Todos los microrrelatos serán publicados en formato de revista digital o ebook.
Banner
Microrrelato
A ver qué te parece esta propuesta de 250 palabras sin contar el título.
¡Bogad, malditos, bogad!
Me gusta navegar, no lo niego. Y he de admitir que desde mi iniciación, no he fallado un solo día. Nunca me achica el temporal ni el humor que flote en el ambiente. Por contra, son factores que me animan. Pues para mí es tan estimulante surcar aguas tranquilas y superficiales como turbulentas y profundas. Disfruto sorteando los elementos. También, ideando formas de hacerlo para sacar provecho. O para hundir a mis rivales de fatigas. Porque eso son para mí, todos los que me rodean en sus propias naves.
Unas veces me gusta apuntar de manera sibilina bajo la línea de flotación, otras —sin embargo— prefiero mostrar mis cartas y hacerlo a pecho descubierto. Me divierte dar una de cal y otra de arena. Un sí pero no. Toma y daca. Localizar la presa, estudiarla, hallar su punto débil, perseguirla y someterla… Para terminar hundiéndola sin piedad. Porque en estas ondas soy el amo.
Es un juego que me fascina, me entusiasma, me pone, me hace sentir por encima del bien y del mal, sin remordimientos. Cada vez que un oponente sucumbe, solo trazo una muesca. Y mientras pueda, seguiré haciéndolo.
Ya voy por un millón de almas atormentadas y expulsadas de sus dominios cibernéticos. Me encanta este invento de la Red, pareciera creado para desplegar en él todo mi sádico talento... ¡Bogad, malditos, bogad!, gritaría todo el tiempo.
Hoy, levanto mi copa virtual y brindo por quienes un día crearon Internet. Benditos seáis. Habéis dado sentido a mi vida.
.png)
¡Hola MJ! Muchas gracias por participar en el microrreto. Tu relato es sorprendente, me había parecido estar leyendo una historia pirata de navegación en toda regla al comienzo, pero luego viene un giro inesperado y el contexto cambia completamente. ¡Qué buen efecto! Desde luego, hay mucho villano suelto por la red.
ResponderEliminarUn abrazo :)
Gracias a ti por la convocatoria. De eso se trataba, de sorprender con el giro final y de contar una práctica —muy desagradable para quien la sufre— que es más habitual de lo que quisiéramos y que por desagradable quise contarla en un tono indirecto. Le di muchas vueltas a cómo hacerlo porque partí de las frases finales para ir hacia el principio y me pareció muy interesante la 'metáfora' del navegante, ya que por la red navegar es lo que hacemos. Me alegra haberte sorprendido. Era lo que pretendía. Y, sí, hay demasiados villanos sueltos, por desgracia.
EliminarUn abrazo :)
Ese pirata cibernético, ssin duda disfruta navegando en su elemento! Por suerte, sus maldades son inofensivas para el resto! Ojala todos los villanos fueran así! Ja, ja! Un saludo!
ResponderEliminarBueno, bueno, no tan inofensivas, no creas. Se puede hacer mucho daño surcando estas aguas turbulentas... Un saludo!
EliminarUna buena forma esta de Internet para canalizar los instintos asesinos de algunos, aunque los verdaderos asesinos no sé yo si tienen suficiente matando de forma virtual. Muy bueno tu relato y con un final inesperado.
ResponderEliminarUn beso.
Por algún lado se empieza...Primero en las redes y después... a dónde los lleve el viento.
EliminarLa verdad es que a veces el tema psicológico hace más daño que si te mataran físicamente, o te llevan a que lo hagas tú mism@, así que...
El giro final fue mi punto de partida, sí, me gusta dejar esos finales inesperados siempre que puedo.
Un beso.
Hola, MJ. También a mí me ha gustado mucho tu micro. No he visto venir el final hasta el último momento y me ha parecido muy sorprendente. Un villano tremendamente actual al que logras dar una voz muy potente. La metáfora del navegante es perfecta. Muchas felicidades.
ResponderEliminarGracias, Marta. Eso pretendía. Tanto la imagen del villano 2.0 como la sorpresa final. Me alegra haberlo conseguido.
EliminarUn beso.
Es una forma de desahogar el ímpetu agresivo de un jugador que, quién sabe si en su vida diaria, contiene esas misma ansias que se ve obligado a disimular. ¿Quién me dice que alguien que disfruta atacando con saña y matando a sus adversarios virtuales no lo hará algún día contra uno de carne y hueso?, je, je.
ResponderEliminarAl principio la historia parecía ir por unos derroteros distintos a los que finalmente nos has desvelado. Buen trabajo.
Un saludo.
Gracias, Josep. La sorpresa final ha sido tan buscada que fue mi punto de partida. En cuanto a lo que comentas, tienes mucha razón. A saber quién puede esconderse detrás de esos villanos cibernéticos que navegan con tan mala saña... seguro que nadie bueno.
EliminarUn saludo.
Buena la metsfora de la navegación. Un texto más elaborado de lo que pareciera. Sin duda, este tipo se reduce a matar en la Red. Es un fanfarrón. Si es tan bueno como dice, tardará más en encontrar la horma de su zapato, pero ña encontrará. Siempre hay otro más fanfarrón.
ResponderEliminarEspero que gayan cesado tus malas experiencias en Internet.
Abrazoo
Gracias, Gabiliante. Eso espero, que se vea su elboración. Las muertes son cibernéticas, aunque físicamente puedan dejar hecho polvo al sujeto que las sufra. Y espero que estos tipos encuentren sus hormas y obtengan lo que merecen.
EliminarEn cuanto a las malas experiencias... siempre vuelven, como el boomerang.
Un abrazo.
Buenísimo tu relato, muy original. Me encanta que nos despistas con aquello de la "navegación". Un villano muy actual, un hacker que bien podría llevar un parche en el ojo y cara de malo, como la canción de Sabina. Saludos.
ResponderEliminarGracias, Ana. Sí, más que hacker pensaba en un hater, que te hace daño y te mata moralmente. Algo que a veces daña tanto o más que si fuera en un sentido físico. Parche, cara de malo y hasta pata de palo. Todo cabe. Saludos.
Eliminar¡Un maldito villano pirata informático! Uno de esos que no los ves venir, hasta que te ha jo...robado. Y pensar que tanta gente cree que, por ser virtuales, no son tan peligrosos. Eso es porque, todavía, no les ha tocado a ellos. Ja Ja Ja!!!
ResponderEliminarSaludos
Cierto. Peligrosos y dañinos. Nunca hay que menospreciar el poder de las redes y demás lugares cibernéticos. Y de los delincuentes que pululan por ellos.
EliminarSaludos.
Espléndido! Tampoco caí hasta el final, pero es obvio que se crea algo nuevo y aparece el malvado que le corresponde. Un abrazo
ResponderEliminarGracias, Juana. Me quedo satisfecha con haber podido sorprender. Era justo lo que pretendía. Un abrazo.
EliminarMientras no sea de manera anónima, creo que internet tiene mucho de bueno para desfogar y encauzar instintos asesinos.
ResponderEliminarDe todas las maneras spicópatas los hay de muchos pelajes y formas. en cualquier plataforma digital, virtual y analógica. No dejan de formar un mundo paralelo.
Abrazo.
Pues siento discrepar contigo, se puede hacer mucho daño con la excusa esa del desfogue. Para desfogar, mejor que cojan un saco de boxeo y lo machaquen a placer. Así no se hace daño a nadie.
EliminarY ojalá formaran solo un mundo paralelo y no se mezclaran con nadie más. Lo malo es que eso no ocurre.
Un abrazo.
Muy buen micro, no me imaginaba el final, realmente me has sorprendido pues no soy muy de juegos y redes, todo muy sencillo lo mío, así que estos asesinos cibernéticos me sorprenden demasiado, muy bueno.
ResponderEliminarSaludos, PATRICIA F.
Hola, Patricia.
EliminarMe alegra haber podido crear sorpresa. Lo que me escama es ese asunto de los asesinos —que varios habéis comentado— porque en ningún momento hablo de muertes ni asesinos. Y ahí lo dejo...
Gracias, igualmente, por venir a leer y comentar.
Hola, MJ:
ResponderEliminarMi más sincera felicitación por tu relato, compañera.
Y es que como compañera te muestras al denunciar, con ingenio y sorna, la filibustería de tanto gavilán del estrecho que, con sus andanadas traicioneras, intenta desarbolar nuestra navegación tranquila.
¡Resistiremos sus ataques y mantendremos izada la bandera de la libertad!
A lo que no me resisto es a felicitarte por tu uso del lenguaje náutico.
Un placer navegar abordalado a tu lado, MJ.
Hola, Nino.
EliminarPara lenguaje náutico el tuyo. Yo he intentado usarlo en el micro aunque no me ha quedado tan conseguido como el que tú has usado en el comentario. ¡Gracias por resistir y mantener izada la bandera de la libertad al viento conmigo!
Un placer para mí llevarte abordalado a mi lado, Nino.
Muy bueno tu micro, ese personaje es malvado y toma las riendas de todo sin pensar en las consecuencias. El final es soprendente.
ResponderEliminarUn abrazo MJ
Puri
Gracias, Puri.
EliminarPor desgracia hay muchos de ese pelaje por estos lares. Me alegra haberte sorprendido. Esa era la idea.
Un abrazo, Puri.
Me ha gustado tu micro, M.J. con un comienzo que parece ambientado entre mares y océanos, sin embargo con el sorprendente giro final, la metáfora inicial nos lleva en volandas enfrente del villano virtual que se refugia en el anonimato de internet para desfogar su maldad. Buen micro muy acorde con el reto.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Carles.
EliminarEs que hay muchas formas de navegación, y nosotros practicamos una de esas modalidades. Me encanta hacer la sorpresa final.
Y el villano virtual me ha parecido que venía al pelo.
Un abrazo.
Hola MJ sin duda los mares de internet tienen de todo me ha encantado tu enfoque enhorabuena y cuidadito con que te aborden. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Ainhoa. Procuraré protegerme y no dejar subir a nadie a mi barco. Estaré ojo avizor.
EliminarUn abrazo.
Soy devoto de los cuentos de mar y piratas, así que me iba a encantar. Enhorabuena.
ResponderEliminarLa piratería siempre tiene una componente romántica muy apetecible.
EliminarGracias, Guille.
¡Hola, MJ! ¡Un pirata de la era digital! Muy bien traída esa semejanza entre internet como un mar en el que navegan comerciantes y gente bien pensante, tras los que le siguen los piratas en pos de sus posesiones más valiosas: sus obras. Un micro estupendo en el que muestras a un villano en las sombras, más ocupado en robar ideas que en trabajar las suyas propias.
ResponderEliminarImagino que también entran en este concepto los hatters, esas personas que trasladan a la red las vomiteras que suelen soltar en la barra de un bar. Y es que nada como el anonimato para desfogarse. Un abrazo!
Sí, aquí caben distintos perfiles porque hay mucha fauna navegando por estas ondas. Fue un micro que empecé casi por la última frase y construí hacia atrás. Me divirtió mucho tratarlo como 'de incógnito' para revelar la verdadera naturaleza del protagonista en las últimas líneas.
EliminarUn abrazo!
Creí que era el mar con su fuerte oleaje, cuando da miedo porque pobre de aquel que se encuentre en su camino. Y al fin me encuentro con otra turbulencia, la cibenética que también hace de las suyas. Sorprendente y muy bien llevado. Un abrazo.
ResponderEliminarCierto. Hay turbulencias por todas partes. Me gustó jugar al despiste, es una técnica muy agradecida. Me alegra haberte sorprendido. Un abrazo.
EliminarAunque al principio despista y creí que iría por otros derroteros, el final me gusta mucho. Un placer leerte. Abrazos
ResponderEliminarGracias, Nuria. Hay que sorprender. Un placer tu visita. Abrazos.
EliminarGenial giro, M.J. los piratas cibernéticos y sus travesuras virtuales, aunque hoy día, esas travesuras son algo tan serio como que se paralizaría todo, y de qué manera.
ResponderEliminarMuy buen micro, nos escondes al prota hasta el giro tan impactante y bien hecho.
Un abrazo!
Le habéis dado tantas interpretaciones —la mayoría que ni siquiera había imaginado— que me quedo ojiplática por completo. Pero sí que hay mucho campo sobre el que actuar con toda la maldad del mundo y hacer mucha pupita. Me alegra haber sorprendido con el final inesperado, eso pretendía.
EliminarUn abrazo.
Hola guapa, un relato con su moraleja y que verdad.
ResponderEliminarHay que tener mucho cuidado en este profundo y gran mar virtual.
Ya que no sabemos los peligros que nos podemos encontrar.
Me a gustado mucho, besos de flor.
Gracias, Flor. Navegamos un mar mucho más peligroso de lo que parece, es verdad. Espero que tengas una buena travesía y te envío de vuelta mis besos para ti.
EliminarMuy bueno, MJ. Muestras muy bien la villanía que navega en el inmenso océano virtual. Enhorabuena.
ResponderEliminarUn saludo.
Gracias, Carmen, se intenta al menos.
EliminarUn saludo.
Hola, MJ. He de reconocer que me has engañado hasta el final. No vi venir que este malvado fuese cibernético. Creí a pies juntillas que iba a ser un pirata , pero de los otros, jajajaja.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues sí, Pedro, es todo muy cibernético aunque no me refería a un pirata en el estricto sentido de la palabra, pero se puede asimilar, sí.
EliminarUn abrazo.
Hola, MJ. Muy buen trabajo. Por un momento me he visto a bordo de un velero bergantín, surcando el mar bajo pabellón pirata (¡Por diez cañones por banda, viento en popa, a toda vela,...), para después descubrir que no he salido de mi despacho y el mío es un viaje por el ciberespacio. Me ha gustado un montón. De verdad.
ResponderEliminarFelicidades.
Gracias, Bruno. Y también por recordarme algunos versos de uno de mis poemas favoritos. Me alegra haberte hecho disfrutar aunque fuera sentado en tu despacho solamente. Gracias de nuevo.
EliminarHola, MJ. Dudaba al principio de si eran rivales de una prueba de vela, peces o enemigos de batalla, hasta que lo del los millones me ha abierto la luz. Se trataba de hackers. Tan desalmados y dañinos como los reales. Buen micro, bien narrado y con intriga que sigue la propuesta. Un abrazo.
ResponderEliminarHola, Isan. Hackers o haters, todos son dañinos aunque de diferentes formas. El mar cibernético es más peligroso de lo que parece en un principio. Me alegra haberos intrigado tanto hasta el final. Un abrazo.
EliminarHola, Hasta los piratas han tenido que adaptarse o morir. Los mares de internet son mas atractivos para esos piratas solitarios de ahora... excelente relato ¡Saludos!
ResponderEliminarGracias, Octavio. Tú lo has dicho, adaptarse o morir. Estos mares que surcamos a diario son más peligrosos de lo que parece... ¡Saludos!
EliminarHola, MJ. Tu pirata virtual dotado de IA, seguramente hakeada en cuanto a normas de conducta y ética, podrá campar a sus anchas y hacer a su antojo. En ese mar de datos todo puede ser posible y al que le toque ser abordado ya se puede dar por jod...
ResponderEliminarSaludos
Cierto, JM. Aprovechas cuelquier momento y lugar para crear o continuar las propias tramas. Eres tremendo. Lo has resumido fenomenal en tres líneas.
EliminarSaludos.
Estupendo relato, M.J., le has dado a Internet toda la dimensión romántica de Moby Dick. Estaba surfeando las olas cuando de pronto me he visto frente al ordenador. Me ha gustado mucho. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias, Lola. Espero que no te hayas empapado demasiado, ja, ja. Pues fíjate que aún no he leído la de Moby Dick, aunque sí he visto algna peli. Me alegra que te haya gustado. Un abrazo.
EliminarGenial. Pensé que se trataba de un pirata, de los antiguos, incluso pensé que quien narraba era el kraken, pero resultó ser un pirata de la red.
ResponderEliminarMe encantó.
Un saludo.
O el kraken de la Red, que seguro que hay más de uno.
EliminarMe alegra que te haya gustado.
Un saludo.
Me ha dado la impresión de que es un pirata informático, haciendo daño a diestro y siniestro. Has tocado una variante del mal poco vista, pero que, por desgracia, hace daños atroces, y quien sabe si no serán así los ataques del futuro...
ResponderEliminarMuy interesante...
Abrazo!
Gracias, Maite. No sé yo si estará tan poco vista, pero daño hace tanto o más que la versión real. De hecho ya son los ataques del presente. Mira si no lo que hacen los rusos.
EliminarUn abrazo.
Muy bien contado.
ResponderEliminarInteresante.
Gracias, Demiurgo.
EliminarHay variedad de posibles interpretaciones.
ResponderEliminarPuede ser que navegar en Internet sea más peligroso de lo pensado. Tal vez haya que tener cuidado con que condiciones se aceptan para entrar en tal página, pudiendo llegar a firmar un extraño pacto sin saberlo.
Tal vez el personaje antagonista sea una IA, un virus, que roba datos. Y los usas con propósitos ocultos.
Un abrazo.
Caben muchas más cosas de las que yo misma pensé al escribirlo. Y eso mola de verdad. Gracias por contarme tus suposiciones. Me han gustado mucho y tomo nota.
EliminarUn abrazo.
¡Hola MJ! Muy original la idea de comparar navegar en el mar con navegar por internet. En los inicios del relato parece que vas a contar la historia de algún famoso pirata pero al final resulta que tal pirata es cibernético. Muy bien contado. Me ha gustado mucho. Un saludo.
ResponderEliminarGracias, Rocío. Pues no pensaba yo que fuera tan original porque hace años se decía así, lo de navegar o surfear por Internet. Me gusta que te haya gustado. Y hacerte disfrutar un ratito. Un saludo.
EliminarHola, MJ. Juraría que te había comentado el relato. Es más, he pasado a ver tus impresiones , pero me he encontrado que mi comentario no se había guardado. Te vuelvo a comentar. Al principio , con el lenguaje que has utilizado , me has engañado totalmente haciéndome pensar que en realidad se trataba de algún pirata de los mares. Luego con el giro todo encaja perfectamente, dejando el micro redondo. Un saludo.
ResponderEliminarSí, sí, ya lo había visto en mi área privada de blogger de comentarios. Lo que no había visto es que estaba catalogado como spam. Ya le he dado el visto bueno y está publicado. Gracias por comentar, no solo una sino 'dos veces'. He tenido un poco desatendida la sección de comentarios porque estoy implementeando, por fin, mis páginas legales. Y me están dando más de un dolor de cabeza. Así que las 'obras' en el blog me han mantenido fuera de combate.
EliminarCelebro haberte 'engañado' hasta el final. Era lo que pretendía, siguiendo la hoja de ruta del buen microrrelato. O, por lo menos, del tipo de micro que más me gusta hacer hasta el punto de empezarlos por el final o por ese giro sorprendente.
En este caso los piratas tienen mucho en común, sean cuales sean las aguas que surquen. Gracias de nuevo por tus impresiones y, sobre todo, por venir a contármelas dos veces. Y disculpa mi tardanza en dar el okey a tu primer comentario. Un saludo.
Hola Mj, me ha encantado tu micro, muy original para estos tiempos, donde Internet es el amo, todo un pirata internauta.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias, Dakota. Atravesamos tiempos internáuticos, has dado en el clavo.
EliminarUn abrazo.
¡Hola, MJ! ¡Qué giro! Me he quedado con cara de arroba. Resulta muy interesante también que hayas trazado un antagonista cibernético. Además, me he quedado con ganas de más: ¿cómo aniquila a sus víctimas? Un abrazo desde la Buhardilla de Tristán.
ResponderEliminarPues, Javier, las aniquila cibernéticamente. Las expulsa de la Red. Les rompe la autoestima. Puede ser de muchas maneras. De forma moral o física, en el sentido de destrozarle el proyecto cibernético a su víctima o la propia vida desde el punto de vista moral. Hay infinidad de posibilidades.
EliminarUn abrazo desde ELEEA books.