Sylvia Plath
Morir
es un arte, como todo.
Yo lo hago excepcionalmente bien.
Sylvia Plath | Lady Lazarus | 1962 | Carlos Montero | El desorden que dejas | Netflix | 2020
Viruca, profesora de literatura, en la cabecera de 'El desorden que dejas' es quien pronuncia estas palabras |
Dicen que Sylvia Plath se enfrentó a la muerte —hasta que vio su cara— tres veces. Solía ocurrirle cada diez años. La primera vez —con solo diez— fue un accidente. Las dos siguientes, ella la buscó. Dicen que se quitó la vida por amor pero estos versos no tienen nada que ver con eso. Del 23 al 29 de Octubre de 1962 escribió el poema titulado Lady Lázaro, en 2016 Carlos Montero —guionista y escritor— incluyó los versos en su novela 'El desorden que dejas' y finalmente, en 2020 han pasado a formar parte de su versión televisiva. Ahí los escuché yo por primera vez. La fuerza de sus palabras me dejò hambrienta y con ganas de saber qué más. Veamos su versión original —con declamación de la autora incluída— y después, una de sus numerosas traducciones al español:
LADY LAZARUS by Sylvia Plath
I have done it again.One year in every tenI manage it——
A sort of walking miracle, my skinBright as a Nazi lampshade,My right foot
A paperweight,My face a featureless, fineJew linen.
Peel off the napkinO my enemy.Do I terrify?——
The nose, the eye pits, the full set of teeth?The sour breathWill vanish in a day.
Soon, soon the fleshThe grave cave ate will beAt home on me
And I a smiling woman.I am only thirty.And like the cat I have nine times to die.
This is Number Three.What a trashTo annihilate each decade.
What a million filaments.The peanut-crunching crowdShoves in to see
Them unwrap me hand and foot——The big strip tease.Gentlemen, ladies
These are my handsMy knees.I may be skin and bone,
Nevertheless, I am the same, identical woman.The first time it happened I was ten.It was an accident.
The second time I meantTo last it out and not come back at all.I rocked shut
As a seashell.They had to call and callAnd pick the worms off me like sticky pearls.
DyingIs an art, like everything else.I do it exceptionally well.
I do it so it feels like hell.I do it so it feels real.I guess you could say I’ve a call.
It’s easy enough to do it in a cell.It’s easy enough to do it and stay put.It’s the theatrical
Comeback in broad dayTo the same place, the same face, the same bruteAmused shout:
‘A miracle!’That knocks me out.There is a charge
For the eyeing of my scars, there is a chargeFor the hearing of my heart——It really goes.
And there is a charge, a very large chargeFor a word or a touchOr a bit of blood
Or a piece of my hair or my clothes.So, so, Herr Doktor.So, Herr Enemy.
I am your opus,I am your valuable,The pure gold baby
That melts to a shriek.I turn and burn.Do not think I underestimate your great concern.
Ash, ash—You poke and stir.Flesh, bone, there is nothing there——
A cake of soap,A wedding ring,A gold filling.
Herr God, Herr LuciferBewareBeware.
Out of the ashI rise with my red hairAnd I eat men like air.
LADY LÁZARO por Sylvia Plath
He vuelto a hacerlo.Una vez por deceniome las compongo...
Especie de milagro andante, mi pielque destella como una pantalla de lámpara nazi,mi pie derecho
pisapapeles,mi rostro sin rasgos, delicadatela judía.
Arráncame el paño,oh enemigo mío.¿Infundo terror?...
¿La nariz, las cuencas de los ojos, todos los dientes?El aliento agrioen un día se irá.
Pronto, pronto la carneque devoró la tétrica cavernaen mí estará a sus anchas
y seré una mujer que sonríe.No tengo más que treinta años.Y, al igual que los gatos, siete ocasiones para morir.
Ésta es la Número Tres.¡Qué basuraa aniquilar cada diez años!
¡Qué millón de filamentos!La multitud de mascacacahuetesse apelotona para mirar
cómo me desenvuelven de pies y manos¡Gran strip-tease!Caballeros, señoras:
éstas, pues, son mis manos.Mis rodillas.Puedo estar en los huesos,
pero, no obstante, sigo siendo la misma idéntica mujer.La primera vez que sucedió yo tenía diez años.Fue un accidente.
La segunda vez estaba decididaa seguir hasta el fin, a no regresar nunca.Meciéndome, me cerré
como una concha.Tuvieron que llamarme una y otra vez,que arrancarme uno a uno los gusanos, como perlas pringosas.
Morires un arte, como todo.Yo lo hago excepcionalmente bien.
Tan bien, que parece un infierno.Tan bien, que parece de veras.Supongo que cabría hablar de vocación.
Es bastante fácil hacerlo en una celda.Es bastante fácil hacerlo, y quedarse esperando.Es la teatral
reaparición a pleno día,en el mismo lugar, ante la misma cara, al mismo bestialy divertido grito
-¡es un milagro!-,que te deja inconsciente.Hay que pagar,
por verme las cicatrices; hay que pagarpor escucharme el corazón...Late de veras.
Y hay que pagar; hay que pagar muchísimo,por palabra o contacto,o un poquito de sangre
o un jirón de mi pelo o de mi ropa.¿Y pues, Herr Doktor?¿Y pues, Herr Enemigo?
Soy tu opus,soy tu inversión,el bebé de oro puro
que se funde en un grito.Me doy vuelta y me abraso.No creas que no estimo tu preocupación en todo lo que vale.
Ceniza, ceniza...que eres tú quien atiza y quien remueve.Carne, hueso, no queda nada...
Una pastilla de jabón.Un anillo de boda.Un empaste de oro.
Herr Dios, Herr Lucifer;tened cuidado,tened cuidado.
De las cenizascon el cabello rojo me levantoy me como a los hombres como aire.
Existe la interpretación generalizada de que para Sylvia Plath la muerte —el rito de la muerte, el suicidio con todos sus elementos— era un paso imprescindible para acceder a la vida. Tal vez fuera así, porque lo que yo veo en el poema es alguien que se reinventa cada diez años, alguien que mata su yo interior para renacer cada cierto tiempo.
Quien habla es una mujer que posee el grande y terrible don de renacer. El problema es que, para ello, tiene antes que morir (...)PRESENTACIÓN RADIOFÓNICA DE LADY LAZARUS
Es también, sencillamente, una mujer buena, normal, llena de recursos.
Sylvia Plath | 1962 | BBC
Su vida no fue ningún lecho de rosas. Perdió a su padre con solo ocho años —nunca le perdonó que se dejara morir con 55 años— y tuvo sentimientos encontrados sobre el modelo de mujer sumisa —como su madre— que la sociedad esperaba que fuera y la radical feminista que se sentía y quería ser: odiaba no haber nacido hombre. Lidió con una dura enfermedad mental —con terapia de electroshock incluída— y con un marido adúltero —al que amaba profundamente— que terminó dejándola por otra. Al final, sucumbió.
Todo ello quedó reflejado en su obra y sobre todo, en su poesía confesional —expresaba detalles íntimos de la vida del autor— con poemas dedicados a su padre —Daddy— o referencias a su marido. Lady Lázaro está considerado uno de sus mejores poemas —con alusiones bíblicas y al holocausto nazi— y uno de los más comprometidos con la justicia y la libertad. Habla del mundo pero también lo hace de sí misma y es una gran crítica a la opresión de toda índole —del pueblo judío y de la mujer—.
Carlos Montero —gallego nacido en Celanova, Ourense— usó estos versos tan contundentes —y la vida de Plath— en su obra 'El desorden que dejas' —una historia de mujeres y muerte— y lo hizo aludiendo al suicidio, al misterio y a la muerte para volver a la vida. Un sabio y feminista homenaje. Gracias a él me he acercado a la obra de la que sin duda fue una mujer excepcional y una poeta, escritora y cuentista genial. Me la habían recomendado hace tiempo pero no llegué a leerla y ahora Montero me la ha traído... este era el momento. Y tú...
¿Qué piensas? ¿Cómo interpretas estos versos?
¡Salud y suerte!
PE: Es difícil encontrar buenas traducciones en poesía. Hay tantas variedades de Español como países hispanos y las interpretaciones que para unos están bien, a otros les chirrían. Tuve que navegar un rato hasta encontrar la que más me gustó. En cuanto a la obra original en Inglés, no sé por qué, existen discrepancias entre la versión escrita y la leída por la propia Sylvia. De todos modos, siempre es un placer escuchar una obra en boca de su autora. ¡Magnífico documento! Y me ha servido para saber que el gato para el mundo latino tiene 7 vidas y para el anglosajón 9... ¡Qué cosas!
Hola!! Qué vida más triste... Por lo que leo, ha sido muy complicada. Entiendo perfectamente que se tenga que reinventar cada diez años. Matar tu yo interior no debe ser fácil. Creo que es muy valiente.
ResponderEliminarBueno, la vida...
EliminarA cada cual le toca su propia historia. Un@s lo toman mejor y otr@s peor. Influye bastante la gente de la que te rodeas. Por otro lado, eso mismo la comvirtió en una autora excepcional.
Hola guapa, pues lei hace un tiempo La campana de cristal y ufff, vaya libro! empezaba bien, medio alegre medio feliz... y poco a poco iba cayendo en algo mucho mas oscuro! me ha gustado leer este poema que nos dejas, no lo conocia y reconozco en el a la autora que lei el año pasado! deberia leer sus poemas, porque aunque me cuestan creo que los disfrutaria! besos
ResponderEliminarA mí me la recomendaron hace tiempo pero no me animé. Seguramente estaba interesada en otras cosas por aquellas fechas. Tuvo bastantes problemas mentales, por lo visto, y su vida fue bastante tremenda. Lo que está claro es que fue alguien muy sensible y el mundo no está hecho para los sensibles. Su obra es de las más interesantes que existen. Leeré 'La campana de cristal' seguro. Ahora ya no me la pierdo.
EliminarUn beso.