El club de lectura — Un jueves, un relato | 04.04.24
CUADRO DE CONTENIDO
El reto
Incomodidades
- PREMISA: Escribe un micro que hable en su nudo de incomodidades.
- POSIBILIDADES: Incomodidades en sentido figurado o literal y en cualquiera de sus acepciones: molestia, engorro, trastorno, inconveniente, estorbo, fastidio, cansancio, aburrimiento, extravío.
- EXTENSIÓN: Un límite máximo de 350 palabras.
- PLAZO: Hasta el jueves 4 de Abril.
- PARTICIPACIÓN: Una entrada en el blog del participante.
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Microrrelato
El club de lectura
—La obra es muy difícil.
—Sí, sí, lo es. Tenían razón, sobre todo J.R. Hay que leerla por lo menos tres veces.
—Exacto. ¿Quién mejor que el autor para saberlo? Si él lo dijo...
—Pero me ha gustado. Yo pienso hincarle el diente de nuevo a finales de año o, como mucho, el próximo enero.
—Estoy de acuerdo, a mí me pasa igual.
Escuchaba cada frase, cada palabra, a cada uno de los miembros del club de lectura, y no podía estar más disconforme. Era la primera vez que leía aquel libro ‘tan complicado’ y lo había comprendido a la primera. No entendía por qué los demás no.
Sí que la estructura tenía cierta complejidad, con planos reales e irreales entremezclados, con muchos personajes, narración coral, continuos flashbacks, y un tiempo nada lineal. Pero para ella —como lectora experimentada— no tenía secretos.
Se encogió. La sensación de incomodidad crecía a marchas forzadas. Se vio incapaz de expresar ante el grupo sus primeras impresiones tras la lectura. Quedaría como una sobrada, una soberbia, una sabelotodo. Y no quería que sucediera justo la primera vez que iba a atreverse a hablar en la reunión.
Visualizar situaciones antes de que ocurrieran no la estaba ayudando. Tan solo acrecentaba sus miedos irracionales. Expiró muy despacio, antes de abrir los ojos. Delante, en el alféizar de la ventana, una paloma blanca fijó sus ojillos en ella un par de segundos antes de emprender el vuelo. Creyó ver una especie de señal, casi sacada de la propia novela.
Miró el reloj. La reunión del grupo de lectura estaba a punto de comenzar. Se levantó del suelo —donde se hallaba sentada sobre una esterilla de yoga— y se dirigió a la mesa que tenía detrás.
Acomodada en su butaca de diseño, se deslizó silente —usando las ruedas— hasta el borde del escritorio. Abrió la tapa del portátil y lo encendió. La cuenta atrás para la conexión estaba a punto de expirar. Alargó el dedo índice titubeando. Finalmente, pulsó. Ya había cuatro miembros en pantalla. Y, por primera vez, allí estaba su cara, por fin dispuesta a intervenir.
Hola MJ, buen micro, es una situación de incomodidad a veces expresar lo que uno piensa en un grupo sobre todo si se es nuevo o se piensa muy diferente, puedo entender a tu protagonista, muy bien narrado, saludos.
ResponderEliminarPATRICIA F.
Gracias, Patricia. Y si a esa situación le sumas el pánico escénico de nuestra prota, ya ni te cuento.
EliminarUn saludito.
Hola, MJ! Parece que no hay término medio: están los que no se callan ni debajo del agua, y que parece que tienen una opinión para todo, y los que no abren la boca por timidez, inseguridad o, simplemente, por considerarse tan poca cosa que temen que su opinión sea una tontería.
ResponderEliminarEl personaje de tu relato, sin duda, logró algo más que dar su opinión, salió de su reclusión, se liberó. Un abrazo!
Cierto, David. Es muy difícil alcanzar el término medio. Estamos hechos de extremos y opuestos, para nuestra desgracia. Aunque a veces es solo cuestión de proponérselo.
EliminarUn abrazo!
Hola muy buenos días, me alegro de que le hayas cogido el gustillo al reto de los jueves, te lo digo yo que te engancha esta, es una adición, muy buena y enriquecedora.
ResponderEliminarEs cierto que leer algo delante de los demás no es fácil, y más cuando se tiene ese miedo escénico. Pero todo en esta vida se supera con esfuerzo y tesón.
Un besote y muy feliz fin de semana.
Sí, lo he cogido aunque no sé hasta cuándo será posible mantenerlo. Me he apuntado a demasiados saraos este año y ya se me están acumulando los deberes. Veremos. Poco a poco.
EliminarUn besote para ti también y buen finde!
Muy cierto lo de esas opiniones que expresas, y que pueden ser tomadas por soberbias, por los que no te conocen a fondo. En ocasiones es mejor, callarlas y decirlas más adelante.
ResponderEliminarMuy buen relato, reto cumplido.
Sí. Eso pienso yo. La verdad es que ir a la contra a veces puede ser contraproducente aunque estés llena de razón.
EliminarEn esto de la escritura estoy algo perpleja. Hace un tiempo me costaba mucho más contar cosas. Estoy pasmada de lo rápido que he podido armar y desarrollar estos dos relatos jueveros.
Gracias por venir y contármelo!
Muy buen relato en que nos metes en esa incómoda sensación de inseguridad previa a alguna primera intervención dentro de un grupo, sea cual fuere el cariz del mismo. Los detalles accesorios colaboran para ponernos en situación y ambiente. Muy buen segundo aporte juevero. Muchas gracias por participar. Un abrazo
ResponderEliminarGracias a ti doblemente. Primero por la convocatoria tan inspiradora, y segundo, por tus buenas palabras al respecto de mi trabajo como contadora de cuentos. Me gusta dar visualización del ambiente en mis relatos. Son detalles que pueden decir mucho si se usan bien.
EliminarUn abrazo, Mónica.
Claro que sí, siempre hay que poder dar uno la opinión que tenga sobre las cosas, eso sí, con tacto y con respeto! Si uno no puede ser como es en realidad, fingir siempre es muy cansado y no conduce a nada! Je, je! Un abrazote MJ!
ResponderEliminarPues sí, Marifelita. Un beso.
EliminarMe ha gustado mucho porque has expresado muy bien esos pensamientos que tenemos ante una situación tan incómoda como la de participar en un clb de lectura por primera vez y ver que todos piensan distinto a ti.
ResponderEliminarMuy bien relatado.
Gracias, Tracy. Me alegro de que te gustara.
EliminarHola MJ, no es fácil hablar ante la gente , o el público, pero estoy segura que el protagonista logrará superar esa sensación de incomodidad. A mí al principio también me pasó y lo superé a marchas forzadas el día que subí al escenario en plena Barcelona con cientos de ojos puestos en ti. Un relato excelente. Abrazos
ResponderEliminarWow! Para mí el pánico escénico siempre ha sido una constante. No me imagino en un escenario como el que comentas.
EliminarAbrazos.
Puede ser una situación incómoda expresar una opinión diferente en una reunión, aun en una forma virtual. Lo que ha incomodado a la protagonista.
ResponderEliminarPero ella se ha atrevido a sumarse a la reunión virtual.
Muy bien contado. Besos.
Yo creo que es mejor expresar una opinión adversa cuanto antes, porque cada día es más difícil, y dentro de poco no se podrá sin pagar un alto precio; la exclusión y quizás también multa😜
ResponderEliminarAbrazooo
Bueno, nunca se sabe, la historia da muchos bandazos. Un abrazo.
EliminarHola MJ, aprovecho para darte la bienvenida a estos retos, que aún no lo había hecho.
ResponderEliminarUn muy buen relato, muy acertado. Encuentro muy incómoda la situación que nos expresas, y bastante habitual, no solo en el grupo de lectura. Eso, y sobre pensar las cosas e imaginar escenarios posibles... Me ha encantado.
Un abrazo!
Gracias por la bienvenida. Y gracias por tus impresiones sobre el relato. Es todo muy incómodo, como bien dices.
EliminarUn abrazo.
No pertenezco a ningún club de lectura por una razón principal: no soporto a quienes adoptan un protagonismo claro, queriendo conducir la opinión de todos a su terreno, para ser el centro de atención y además demostrar que los demás se equivocan y que la única interpretación válida de la historia que cuenta un libro es la de ellos/ellas, los ego-protagonistas.
ResponderEliminarPersonalmente, siempre veo las interpretaciones de los contenidos de un libro como algo tan privado que nunca lo compartiría con otros en (según qué novelas).
Muy buena aportación. Enhorabuena.
Nota: mi anterior comentario en el reto del jueves pasado no fue publicado.
Y este tapoco había sido publicado. Estaba catalogado como spam a saber por qué. Cuando termine de contestarte me voy a publicarlo, no me enteré de que no había sido publicado. Mis disculpas.
EliminarDicho esto, en mi relato me refiero más bien a un libro de difícil interpretación a priori. La verdad es que es algo autobiográfico en parte. El caso es que nadie había pillado el contenido a la primera porque es un libro que tiene fama de ser difícil de descifrar y pasa de planos reales a planos irreales continuamente. Los demás lectores no eran capaces de distinguir cuando hablaban en cada plano y cuando saltaban de uno a otro. Eso otro quetú comentas aún no lo he visto. Cada uno opina lo que ve y no impone sus opiniones a otros. Solo se aportan detalles curiosos o cosas que se van encontrando por aquí y por allá dentro de la historia en cuestión. Lo cierto es que es un buen grupo.
Gracias, Marcos, por venir y contármelo.
Creer que comprendiste muy deprisa es bueno, pero dá apuro si parece que nadie más captó los entresijos de esa lectura.
ResponderEliminarUn abrazo
Desde luego, Albada. Ya te digo que sí lo da. Un abrazo.
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