Bajo el mar... — #fuegoenlaspalabras 06/21
CUADRO DE CONTENIDO |
Relato
Bajo el mar...
—Yo sé cómo llegar a la ciudad submarina —dijo Ron con chulería.
—Qué dices… —le soltó Kirke. Hacía dos horas que se había unido al grupo.
—Yo me apunto. —Carlo dio un paso y se colocó al lado de Ron.
¿Una ciudad submarina? Kirke estaba segura: solo era una bravata para impresionarla. Dio media vuelta y sacó una pierna del barco para bajar al pantalán dando por concluida la velada.
—¡Espera! —gritó Ron—. Te dejas el bolso.
Alargó el brazo para coger el asa y un inesperado tirón la arrastró de nuevo al barco; al arrancar terminó sentada en el asiento de popa. Frunció el ceño mientras un escalofrío le recorría el cuerpo.
Surcaron las aguas a toda velocidad dejando atrás puerto y civilización, sumergiéndose en una oscuridad sólida. A Kirke la brisa con sabor a sal le resultó amarga hasta que redujeron la marcha.
—Os habéis pasado —les recriminó—. No quería venir a… —Se detuvo, tenía los ojos muy abiertos—. ¿Dónde estamos?
—En la cueva del pirata, milady. —Carlo hizo una reverencia.
Acababan de entrar por una abertura del acantilado, al fondo apenas se distinguían una puerta y un par de argollas. Los chicos bajaron terminadas las maniobras de amarre, Kirke se rezagó: aquel lugar le daba mala espina.
—¡No pienso bajar! —Para remarcarlo balanceó su dedo índice.
—Allá tú —dijo Carlo.
Ron le ofreció su mano derecha. Ella, tras titubear, terminó por cogérsela. Abrieron la puerta y subieron al ascensor: no ocurrió nada.
—¿Y ahora qué? —preguntó Kirke.
Los chicos se encogieron de hombros.
—Ahora es cuando salimos y… —Sonó un silbido, la puerta del ascensor inició el cierre—. ¡No, no, no, noooo! —Ron intentó buscar algún botón para frenarla: no había ninguno. El elevador arrancó.
Descendieron bastante hasta detenerse. Abajo había un pasillo tubular poco iluminado. La única opción: seguir adelante hasta la siguiente puerta automática.
—¿Qué… es todo esto? —preguntó Kirke.
Ron sonrió con picardía y contestó:
—La ciudad submarina.
—Eso ya lo veo pero… —Kirke señaló al frente. Un grupo de humanoides se aproximaba.
Nadie abrió la boca… al menos para hablar.
—¡Bienvenidos a Sima Siete! —dijo con naturalidad uno de ellos—. ¿Cuál es el propósito de vuestra visita?
—Hacer turismo, no te jo… —espetó Carlo.
A Kirke se le escapó una risotada nerviosa. Nadie se inmutó.
—Tenemos un problema —dijo uno de ellos mientras los conducían a una sala acolchada—. Habéis comprometido nuestra seguridad, por eso… —Sonó un zumbido y se desvanecieron.
Iniciaron el borrado selectivo: extra t e r r e s t r e s, cueva p i r a t a, ci u d a d, Sima S i e t e, ascen s o r, puerta o c u l t a, bajo e l m a r... Cada palabra, recuerdo o imagen sobre el complejo y sus habitantes se fue descomponiendo hasta desaparecer de sus cerebros.
Mientras regresaban nadie habló: solo miraban al frente con el viento azotando sus caras. En el puerto los chicos levantaron la mano al unísono para despedirse.
—¡Adiós! —dijo Kirke. Bajó al pantalán y esta vez nadie tiró de su bolso.
Alboreaba.
El reto
Normas
- EXTENSIÓN: 30 versos para poemas y 500 palabras para texto narrativo en tu blog; 20 versos y 300 palabras si lo subes en los comentarios, ambos sin contar el título.
- FACEBOOK: Usar siempre el hashtag #fuegoenlaspalabras
- PARTICIPACIONES: Si son varias, cada una irá en un post individual.
- PLAZO: Hasta el 30 de Junio a medianoche (hora peninsular española).
Interesante relato que puede poner los pelos de punta si nos planteamos qué cosas podemos haber vivido cuyo recuerdo se nos haya borrado. Y es que puede que haya recuerdos que no podríamos soportar. Inquietante.
ResponderEliminarUn beso.
Se nos haya borrado o nos hayan borrado... lo he planteado como una especie de abducción submarina. Aunque en este caso los abducidos van allí por su propio pie.
EliminarEl mundo extraterrestre y esos ovnis que entran y salen del mar siempre me han intrigado... ¿Qué habrá allí debajo o qué harán en las profundidades?
En cuanto al olvido, tienes razón que inquieta. El cerebro escoge a menudo por sí solo qué es lo que recuerda y qué lo que olvida. Gracias por estar ahí. Un beso.
¡Hola, MJ!
ResponderEliminarMe ha encantado leerte, la verdad es que los relatos se te dan muy bien.
El mar tiene sus secretos y es realmente curiosa esa fascinación que ejerce sobre nosotros.
Suerte con tus otros retos ;)
Un abrazo.
¡Hola MAVA!
EliminarMe encanta que te haya encantado leerme, la verdad es que estoy en proceso de aprendizaje y este año me he propuesto dar un salto cuántico con respecto a mi nivel inicial, que no era muy alto. Estoy aprendiendo bastante con algunos de ellos porque antes escribía según me salía y ahora ya voy poniendo las cosas en su sitio y al mismo tiempo sabiendo más o menos lo que voy haciendo. Estoy contenta con la evolución.
Gracias por tus buenos deseos aunque me he apuntado a tantos que los de leer se me están quedando un poco atrasados, no por la lectura en sí sino por las reseñas. Estoy pensando en hacer algunas de varios libros agrupados que tengan algo en común como género o tipo de autor. De otro modo ya se me hace imposible del todo. Ya veremos cómo va la cosa.
Un abrazo.